Cerca de la parte inferior de la Isla La Española, en el sureste de Haití, se encuentra un pueblo olvidado, Boucan Ferdinand está aislado de su propio país y se va vaciando lentamente a medida que sus residentes se van al país vecino República Dominicana.
Timatant tiene una parálisis parcial que le impide realizar su trabajo. "No hay médicos aquí. Es más fácil ir a Duvergé (República Dominicana). Hay un camión para ir allí", dijo.
St. Pierre dijo que aconsejan a los productores que no hagan carbón. Algunas personas en Haití culpan a la producción de carbón como una de las razones de la deforestación existente.
Sin servicios de salud, electricidad o caminos pavimentados, Boucan Ferdinand perdió su único camino hacia la ciudad haitiana más cercana, Bois Negresse, en devastadoras inundaciones en 2004.
Algunos de sus residentes se han ido a la capital haitiana de Puerto Príncipe y otros se han aferrado a una vida precaria. Muchos han cruzado ilegalmente en la República Dominicana más próspera.
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